Veo el final de las vacaciones.
El mar. Otro placer indescriptible. Estoy sobre mi toalla, en la arena, y escucho el ritmo de las olas rompiendo a mi lado (sólo necesito aislar las voces de tres adolescentes hablando sobre su fiesta de la noche anterior y las de cuatro señoras discutiendo sobre su cursillo de informática básica). Noto los rayos de sol mientras las niñas descubren juegos en la arena y en el agua.
Se terminan las vacaciones.
Se terminan las vacaciones.
Qué bonito! A disfrutar de ese tiempo maravilloso.
ResponderEliminar